Un momento para cada cosa (episodio 02)

Todos los viernes a las 8:00h (CEST)
Suscríbete: Spotify / Apple Podcast

 Transcripción

Ir por la calle, muchas veces me resulta como una una dosis de realidad. Normalmente suele ser así, si no llevas los auriculares puestos, si no lleva música a puesta, si no estás hablando por teléfono, si no, simplemente vas caminando y vas observando lo que vas sucediendo, lo que se te va presentando a tu alrededor.

Y esto te lo digo porque me acabo de tropezar con una persona, lo habitual: vas por una calle estrecha y una persona que va viendo el teléfono se tropa contigo.

Y es ahí el kit de la cuestión ¿Por qué estamos distraídos? ¿Por qué nos distraemos con tanta facilidad? con una abrumadora facilidad, diría yo, ¿eh?

Y claro, yo, por ejemplo, cuando voy por la calle. Sí, llevo los auriculares. —normalmente llevo uno para estar atento a todo lo que pasa— Y si no, no llevo nada.

Y claro… pues ves el lugar bonito donde vives, te detienes a ver —oye, han puesto este local o este ¿No? Y estás un poco presente…

También me gusta ver a la gente ver cómo camina la gente. Qué cosas hace. Cómo se comportan… Pues, las modas, los estilismos. Me encanta como se viste la gente, me gusta verlo.

Esto parece cosa de señor, mayor que se detiene un en un banco a a ver a la gente pasar. Pero bueno, el hecho es darte, cuenta de lo que va sucediendo tu alrededor, darte cuenta de las cosas que van pasando.

Y a veces con el teléfono —que me parece el colmo— caminar y ver el teléfono al mismo tiempo. Me parece el colmo porque yo no, no uso coche. Entonces, para mí, caminar es conducir. Y si no, no usas el teléfono mientras conduce ¿Por qué lo haces caminando? No dejas de ser otra forma de conducirte. Y ahí está el detalle, que yo digo.

Jolín, sería super bueno, que pudiéramos tener la capacidad, de saber cuándo es el memento para cada cosa. Muchos padres y se lo dicen a sus hijos, y siempre escuchas a la mamá que dice “oye, fulanito, deja eso que ahora no es momento”. Pero sin embargo, nosotros no hacemos lo mismo con el teléfono. No hacemos lo mismo con con nada.

Osea, ¿dónde está nuestra vara de medir o dónde está nuestra ecuanimidad a la hora de decir y hacer las cosas?

Y eso es lo que me pregunto dónde está y si queremos encontrarla también, si queremos encontrar ese momento para decir esto se hace ahora, esto no, o es que, como adultos ¿tenemos el poder para hacer lo que nos dé la gana?

Yo creo, y eso es una cosa que aplico para mí, yo creo que sí, que es importante estar presente en todas las cosas que haga en tus decisiones.

No hay que intensito tampoco poniéndole excesiva atención a todo. Pero si a lo importante, si a lo que tal vez deberíamos de decir esto me distrae, esto no me distrae. Esto está bien. Esto no está bien.

Porque después son cosas que tú sabes, perfectamente, que están bien hechas o mal hechas y de alguna manera en no comprometerte contigo mismo a hacer un poito mejor en tu día a día, es una falta de compromiso también con con el que tienes al lado.

Yo siempre digo que “lo bueno también se pega” y precisamente por simplemente hacer un poquito de ejemplo, dentro de tu día a día, también hará que de aquello de lo que tanto te quejas a tu alrededor pueda cambiar en algún memento.

2 respuestas a “ Un momento para cada cosa (episodio 02) ”

Deja un comentario